En mi ya larga investigación sobre el fantástico argentino del siglo XIX, he explorado numerosos archivos y repositorios. En las secciones de manuscritos de algunos de ellos, he hallado estas piezas teatrales de género horripilante y/o fantástico, que no estaban registradas en ninguna historiografía. Eran completamente desconocidas, y jamás fueron dadas a la imprenta. La primera es La ánima en pena (1819) de Laureano Mortisombis (¡!). Se trata de una lúdica sopa de letras que esconde el nombre de Luis Ambrosio Morante, el inspirador del Himno Nacional Argentino. Le siguen dos piezas contemporáneas: La fantasma del lugar y El duende en el gabinete. ¿Qué tal el hallazgo?
5 comentarios:
Increíble... me deja sin palabras... aún hurga usted más que el Desván... enhorabuena (aún no doy crédito)...
Tremendo. Y anterior a la Galería fúnebre de espectros y fantasmas, el primer intento de escribir a la gótica en lengua castellana.
Me alegro que les hayan interesado estas obras. Hay mucho material que estoy sacando a la luz de esta época. Hace poco, precisamente, publiqué un artículo sobre el teatro de horror argentino en una revista literaria.
Sin embargo no es la "Galería fúnebre de espectros y sombras ensangrentadas" el primer exponente del gótico en tu tierra. Recuerda las "Noches lúgubres" de Cadalso.
Pero las Noches Lúgubres es algo más bien prerromántico, sentimental. Aunque haya fosas y enterrador de por medio...
Pues de hecho la novela gótica inglesa (y alemana) es uno de los principales antecedentes del Romanticismo.
Cadalso tuvo muchos imitadores en su época y aún después, ya que aparecieron numerosas "Noches lúgubres" apócrifas. Es decir, generó escuela. El gótico español temprano es poco conocido, lamentablemente, debido a dos factores:
1- La mayor parte de sus exponentes son relatos breves que aparecieron en periódicos y revistas literarias, y que no han sido compilados en formato de libro. Por ello, sólo son conocidos por pocos especialistas.
2- Existen numerosos elementos góticos en la novela histórica española del período 1790-1900, tanto a nivel de trama como de personajes o de ambientación. Pero, como los títulos no suelen ser reveladores de esto, la mayor parte de la gente lo ignora. Es necesario leer estas obras para apreciar dicha circunstancia.
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